La Gran Muralla China




La Gran Muralla de China es célebre en todo el mundo. Atraídos por su gran renombre, turistas de todos los países van a visitarla, porque todos quieren ver con sus propios ojos esta maravilla de la Tierra. La Gran Muralla se ha construido en terrenos muy accidentados y, militarmente hablando, de difícil acceso. Se extiende de una manera. majestuosa e imponente sobre el territorio chino de Este a Oeste. Su longitud total llega a más de 12.000 li (Un li equivale a 1/2 kilómetro; se calcula que tiene unos 21.200 km de longitud); de ahí la calificación de la "Gran Muralla de Dicz Mil Li" (万里长城 Wànlǐ chángchéng). La obra tiene ya una existencia de más de 2.600 años. Después de que Qín Shǐhuáng (秦始皇 259-210 años a.C.) unificó China, este primer emperador de la dinastía Qin hizo unir las murallas del norte de China para prevenir al imperio no de posibles invasiones foráneas. Luego, las dinastías posteriores las repararon o construyeron nuevas partes.

 La Gran Muralla se ha construido en terrenos muy accidentados y, militarmente hablando, de difícil acceso. Su longitud total llega a más de 12.000 li (Un li equivale a 1/2 kilómetro. Se calcula que en total tiene unos 21.200 km de longitud)


La Gran Muralla china es el símbolo más reconocido de China. Recorre más de 7.000 kilómetros desde el mar de Bóhǎi (渤海) hasta más allá del desierto del Gēbì (戈壁), abarcando en total siete provincias chinas de Este a Oeste. UNESCO la declaró Patrimonio de la Humanidad en 1987.

¿Cómo se construyó?

Su construcción duró más de dos mil años, empleó a decenas de millones de obreros y comenzó a ser como hoy la conocemos en el 220 a.C. bajo la idea original del emperador Qín Shǐhuáng (秦始皇). Diferentes secciones de fortificaciones ya existentes en dinastías anteriores, pero desperdigadas por la geografía, se fueron juntando progresivamente formando un sistema defensivo unificado para detener las hordas invasoras procedentes del norte –principalmente mongoles-. Se dice que el primer emperador de China reclutó a más de 500.000 obreros para trabajar duro durante diez años y unir las varias secciones ya existentes para convertirlas en una única muralla fortificada. La construcción, sin embargo, continuó hasta la dinastía Ming (1368-1644).

La Gran Muralla china es el símbolo más reconocido de China. Recorre más de 7.000 kilómetros desde el mar de Bóhǎi (渤海) hasta más allá del desierto del Gēbì (戈壁)

Para levantar la muralla, se aprovechó la propia orografía del terreno y los terraplenes, hechos de piedras, tierra y madera por las sucesivas dinastías, fueron cubiertos por los constructores Ming con ladrillos fortificados. Además, levantaron troneras y almenas para proteger a los arqueros, ensancharon la muralla para que cupieran cinco caballos uno al lado del otro y añadieron numerosas atalayas a lo largo de la misma, lo que aseguraba que cualquier movimiento de los posibles enemigos fuera advertido rápidamente y comunicado al cuartel general.

De hecho, las atalayas tenían diversas utilidades. Por un lado, podían servir de almacén de víveres, armas o agua, de refugio para las tropas o de establo para los caballos. Y por otro, eran perfectas torres de vigilancia y un método muy eficaz para avisar de la presencia extraña (mediante señales de humo, destellos de luz o sonidos). Así, servían de medio de comunicación rápido, pues en pocos minutos las noticias habían llegado a cientos de kilómetros, lo que resultaba en una expedita respuesta del ejército y un método muy eficaz de defensa del imperio.

De hecho, las atalayas tenían diversas utilidades. Por un lado, podían servir de almacén de víveres, armas o agua, de refugio para las tropas o de establo para los caballos.

No obstante, la muralla, en realidad, falló en su propósito de rechazar a los invasores por la sencilla razón que medía seis metros de alto. Así, a lo largo de la historia fue atravesada en multitud de ocasiones por las tropas mongolas de Gengis Kan (1162-1227) y más tarde por el ejército manchú de las tierras del noreste.

Muchos tramos originales han sido destruidos o bien por el paso del tiempo, por la naturaleza, el abandono o por los campesinos que durante años han utilizado sus preciados ladrillos y rocas para levantar cercas para delimitar sus propias tierras. Las zonas mejor conservadas y restauradas de la Gran Muralla y que se pueden visitar están en los alrededores de Beijing y Tianjin y en la provincia de Hebei.

No obstante, la muralla, en realidad, falló en su propósito de rechazar a los invasores por la sencilla razón que medía seis metros de alto. Así, a lo largo de la historia fue atravesada en multitud de ocasiones por las tropas mongolas de Gengis Kan (1162-1227) y más tarde por el ejército manchú de las tierras del noreste.

En China hay un dicho popular: "No es héroe quien no llega a la Gran Muralla". Si tienes la oportunidad de ir a China, has de ir a apreciar su majestuosidad y a tener el gusto de ser un héroe.



Mira este documental sobre la muralla china:




¿Te ha gustado? ¿Cómo dar las gracias? ¡Comparte con tus amigos!

Si este post te ha ayudado, inspirado o enseñado algo nuevo, tu también puedes ayudarnos: ¡difunde la palabra! Este blog crece cuando lo compartes.

Haz parte de nuestros grupos de WhatsApp para recibir más contenido como este directo a tu celular, recibir las novedades y conocer amigos que también están estudiando chino. Haz clic aquí para unirte.